miércoles, 26 de noviembre de 2025

Valle de los Caídos-El Escorial 01/02/2025

Teníamos que estar en Madrid el primer sábado de febrero por la tarde y, de camino, aprovechamos el día para conocer mejor dos lugares que hemos visto en multitud de ocasiones desde la autovía pero que apenas conocíamos, el valle de los Caídos, ahora conocido oficialmente como de Cuelgamuros, y el Monasterio del Escorial por dentro (junto a éste y los parques que lo rodean ya habíamos dado algunos buenos paseítos hace tiempo). 

Nos tomamos el viaje desde Salamanca sin prisas, y subimos por el puerto de Guadarrama después de unos cuantos añitos sin abandonar la autopista camino de la capital. Poco antes de las 11,30 h. nos encontrábamos ya en una de las explanadas frente a la gran cruz de 150 m. de altura (la más alta de la cristiandad) sin apenas gente por allí.


Se nota alguna dejadez en el mantenimiento de
elementos destacables, como esta puerta




Nos acercamos a un patio interior contiguo  y hacemos unas fotos por el lugar, desplazándonos de nuevo en coche hasta el aparcamiento más utilizado para ver la otra gran explanada que da acceso a la iglesia subterránea y es la más fotografiada.





La imagen de la Piedad con su hijo muerto a
sus pies, de Juan de Ávalos es impresionante



Sobre las 13,15 h. entramos en la iglesia, poco después de una misa con canto coral que no pudimos ver.




Tras un cuarto de hora salimos de allí y tras hacer alguna foto más  sobre la explanada y los alrededores nos dirigimos a El Escorial.






A la izquierda se atisba la pedriza del Manzanares y a la
derecha las mayores altitudes de Guadarrama con algo de nieve

Antes de las 14 h. entramos en el interior del monasterio, cuyas estancias visitables me van a sorprender gratamente.

La gran biblioteca posiblemente sea la estancia más imponente

Salón del Palacio de los Borbones


Sala de las Batallas

Los globos terraqueos de distintas épocas muestran detalles
curiosos como lo que se creía la "isla de California antes de
explorar más al norte y descubrir que se trataba de una península.


Tras visitar varias de ellas pasamos al patio interior principal y desde allí accedemos a la Basílica. Luego revisitamos alguna zona que nos gustó especialmente y ya cerca de las 15 h. salimos para comer en un establecimiento próximo y completar el día en Madrid.

Patio principal que da acceso a la basílica

El retablo principal

Choca la falta de ornamentos del estilo herreriano,
fruto en gran medida de las recomendaciones de 
sobriedad y austeridad que trajo la Contrarreforma



Me sorprendió especialmente esta imagen magistral del
Cristo Crucificado que Benvenuto Cellini tuvo la osadía
de representar totalmente desnudo... aunque sólo se puede
observar cubierta por un "pudoroso paño de pureza"






Los panteones de reyes e infantes atesoran algunos
conjuntos escultóricos también sorprendentes


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