Subida al Vizcodillo desde Doney de la Requejada 22/07/2023.

Retomo la puesta al dia del blogggg tras lo que está siendo un verano muy movidito en diversos aspectos, y no sólo en el que a mí más me gusta, que es el viajero, cuyas experiencias suelo compartir por aquí. Dejo aparte esa costumbre de seguir un orden cronológico en las salidas que voy añadiendo, y subo ahora una pequeña ascensión justo en medio de los dos platos fuertes, que espero compartir pronto.

Nunca habíamos subido a esta cumbre de la sierra de la Cabrera que separa Zamora y León, prácticamente con la misma altura que la más conocida Peña Trevinca. A decir verdad, no había oído hablar de ella antes, pero la próxima "convocatoria" del "Desafío Vizcodillo" nos decidió a "embarcarnos" para conocer algo nuevo y familiarizarse el amigo Paco con la zona por si afrontaba alguna de las dos carreras de montaña de dicho "Desafío".

Dejamos el coche en el pueblo y comenzamos la marcha cuando falta un cuarto de hora para las 11 h.

Pollo volandero de herrerillo común, uno de los pocos 
pájaros que vamos a ver a lo largo del día.

Pasando junto a un cuidado castañar

Media hora después cruzamos las transparentes aguas del río Negro por un  puente (no parece mala idea acercar el coche hasta esta zona, pues nos toca cruzar la carretera poco después y se reduce una ruta que supera con creces los 20 kms.).

Comienza ahora un tramo poco atractivo debiendo transitar ya por algún cortafuegos hasta la bajada a un nuevo curso fluvial, el del arroyo de Veganabos, que cruzamos de piedra en piedra.

Aunque la vegetación autóctona escasea, hay síntomas
de gran riqueza faunística por la zona, como estas cacas
lobunas repletas de pelos y huesos o las "ladras" de corzo que oímos.

Medioluto ibérica (melanargia lachesis)

La pendiente aumenta cada vez más (no en vano  más de 1000 m. separan a Doney de la cumbre), y el tránsito por pistas y cortafuegos se convierte en protagonista hasta la llegada a un brezal sobre las 14,30 h. desde donde, a pesar de la mala visibilidad del día que nos acompaña, podemos distinguir la joya de la corona de estas tierras, el lago de Sanabria.

Vimos a estos valientes bajando por el camino
de vuelta, preparando el "desafío", sin duda.

Macho de mosca asesina (dasypogon diadema). Como su nombre indica, es
el terror de insectos más pequeños que ella... y ésta pasaba de los 3 cm.

La gran curva de la carretera justo antes de llegar al puerto del Peñón.

Lago de Sanabria

Sobre las 15 h. llegamos a la zona alta de la sierra, aunque aún nos falta una media hora para hacer cumbre, ya transitando por el brezal sin apenas desnivel.

Al fondo el embalse de Cernadilla.

Por aquí ya se aprecia el vértice geodésico al que nos dirigimos.

Poco antes de llegar al Vizcodillo oteamos una manada de machos jóvenes de cabras monteses que nos sorprende encontrar por aquí.

Poco a poco parece ir aumentando la población heredera de los 13 ejemplares
de Capra Hispanica procedentes de Gredos que se liberaron por aquí en 2006.

Sobre las 15.45 h. por fin llegamos al vértice geodésico con el nombre del pico, procediendo a recrearnos con el paisaje, comer y sestear un rato...

Ortiguera (aglais urticae)

50 minutos más tarde comenzamos el descenso, pasando sobre las 17 h. junto a una zona rocosa que asciendo en un  vano intento de distinguir la cercana laguna de Truchillas desde allí.

Bajando por el valle que veis se puede acceder a la laguna de Truchillas.

Analizando las posibilidades de la zona sobre el mapa, y a la vista de lo que hemos encontrado en el día de hoy, se presenta mucho más asequible el Vizcodillo desde el puerto del Peñón que separa Doney de la leonesa Truchillas, y mucho más bonitas posibles marchas desde allí hasta la laguna del mismo nombre, volviendo de nuevo al pueblo de salida o al puerto...

El descenso lo haremos en gran parte siguiendo un recorrido diferente,  no muy alejado del de subida, pero que hace que la llegada al  arroyo de sugerente nombre (Veganabos) nos lleve más tiempo del esperado.

Cuando por fin lo logramos, paramos un buen rato para meter los "pieses"  en el agua y darles un merecido descanso reparador... Son ya casi las 19 h. y por aquí enlazamos con el trayecto de subida.

Cuando pasamos junto  al cuidado castaño que nos llamó la atención por la mañana ya han pasado 9 horas desde que lo vimos... Los 15 minutos que nos quedan hasta Doney se nos  hacen un poco pesados, ya con poca agua en la cantimplora.

El gran castaño que ya nos llamó la atención 9 horas antes...

La  recompensa llegará en la meta, con una fuente bien fresquita que "nos colma de alegría y satisfacción..." 😅.

No tendremos que volver a Salamanca raudos y veloces en esta ocasión, y haremos noche en el bonito pueblo zamorano de San Pedro de Zamudia, disfrutando de un paseo nocturno bajo estrellas que no podemos ver en las ciudades, y de otro matutino hasta la espectacular escultura de la Virgen del Carmen de reciente creación que corona un cerro en sus proximidades... Tampoco faltó un bañito en las aguas del Tera...

Os dejo para acabar plano y estadísticas de una fácil aunque muy exigente marcha (23 kms. y más de 1000 m. de desnivel más el acumulado...) que, como digo más arriba, en mi opinión puede mejorarse cambiando los lugares de origen y llegada y visitando la laguna de Truchillas. El track que hemos seguido podéis encontrarlo aquí.