miércoles, 27 de enero de 2021

La Fregeneda-torreta del agua-ferrocarril-Águeda-La Fregeneda 03/01/2021

Nueva circular, y por los Arribes... ¡Todo un aliciente para comenzar el año! Empezaba bien este 2021 del que tanto esperamos... aunque ya se va encargando la tercera ola de ir bajándonos los humos...

En esta ocasión nos dirigimos a La Fregeneda para llevar a cabo una marcha distinta de las habituales, aunque coincidente en varios tramos con alguna de ellas. Nuestro primer objetivo va a ser la torreta del agua, una alta estructura en forma de chimenea a poco más de 3 kms. del pueblo que llama poderosamente la atención a todo el que se apercibe de su presencia. Parece un espejismo encontrarse con una torre de ocho pisos en mitad de ese paisaje natural agreste rebosante de vegetación y de profundas gargantas fluviales que conforma las Arribes. Situada en un alto visible desde bien lejos, parece un faro desubicado en tierra firme. Al contemplarla, siempre me viene a la cabeza la torre de Mordor de "El Señor de los Anillos" aunque la construcción de esta estructura resulte algo más prosaico pues se trata de un depósito de aguas ya en desuso...

Temperaturas de -8º y nieblas persistentes nos acompañaron
durante casi todo el trayecto rodado camino de los Arribes.




Con los prismas y abusando de zoom se deja ver un pueblo portugués grande
más allá de las nieblas del Duero. Creo qu se trata de Torre del Moncorvo.


A la izqda. Peña Redonda, que junto a la próxima Mesa de los
Curas conforman un santuario rupestre prehistórico catalogado. 




Al llegar allí ya cerca de las 11,30 h. tras caminar en torno a una hora desde el pueblo, descansamos unos 20 minutos, aprovechando algunos para "comer el cacho".


Restos de un nido de golondrina daúrica.

Estamos ya cerca de los despeñaderos del Águeda,
donde les encanta posarse a los buitres leonados...

El Águeda desciende impetuoso desde el término de Sobradillo.

Seta "escarchada".


Volvemos sobre nuestros pasos unos cientos de metros y nos vamos en busca de la vía atravesando primero una finca situada en una zona con escaso desnivel.




Luego, bajando entre vegetación silvestre, ya podemos ver el ferrocarril bajo nosotros. Llegamos a él sobre las 13 h. casi en la entrada del túnel más emblemático del recorrido de este Bien de Interés Cultural, el de Morgado. Con 423 m. de longitud y en curva, lo  que garantiza una obscuridad absoluta en un gran tramo, se ha convertido en el lugar elegido para su reproducción por más de 12.000 murciélagos, una de las colonias más importantes de la península ibérica. Un cartel que encontramos junto a la vía nos lo recuerda, y también que son el murciélago de cueva y el murciélago ratonero grande las especies más abundantes, aunque se han localizado también al menos cuatro especies más; en el parque natural se pueden ver 21 de las 29 especies presentes en la Península...



El túnel se encuentra cerrado por el conflicto surgido con la empresa encargada de "poner en valor... y rentabilizar..." el tránsito por esta maravilla de la ingeniería envuelta de una belleza paisajística única que es esta linea férrea. Se ha recuperado un recorrido alternativo de unos 1400 m., obligatorio para los futuros clientes entre marzo y noviembre para facilitar a los murciélagos la cría de sus futuras generaciones que va a ser el que sigamos a partir de aquí.

Mientras nos recreamos con los interesantes paneles sobre fauna, flora, geología... de la zona, otro grupo de senderistas que vienen siguiendo la vía desde su inicio coincidirá con algunos de nosotros varias veces.













Pasadas las 14 h. llegamos a la otra entrada del túnel, volviendo a la vía en el inicio del puente que supera el valle del arroyo Morgado, cuyos más de 20 metros de altura impresionan aún más por lo inclinado de este valle que se precipita en busca del río Águeda, esplendoroso a nuestra izquierda.






Los frecuentes puentes y túneles van a amenizar el tramo de la vía que hacemos, ya impresionante con las vistas que se nos ofrecen... y aún más al llegar a una zona donde podemos ver buitres posados muy cerca de nosotros y disfrutar de su planeo.













Un poco más adelante podemos contemplar al otro lado de la Raya que aquí marca el Águeda un arroyo con bastante caudal que se desploma en su busca formando bonitas cascadas.





Tras pasar el túnel 8, con  una curiosa "cabeza pétrea de erizados pelos" vigilando su entrada, paramos a comer en un rellano junto a la vía, siempre vigilados por el ojo de Sauron, el Señor oscuro... Y mientras en Salamanca aún siguen a bajo cero, aprovechando la benignidad del clima arribeño, no faltará una buena siesta tras dar cuenta de nuestros manjares.









Ya son las 16 h. cuando nos ponemos de nuevo en marcha, y hora y media después abandonamos la vía al llegar al cruce con el Camino del Río que baja desde La Fregeneda a su Barca (topónimo que se repite en Arribes para denominar los lugares donde existían medios para superar los ríos y enlazar con caminos portugueses).


Chozo de pastores



Una salida de túnel sin "vestir" con piedra de cantería.

Las aguas del Águeda bajan crecidas y permiten hacerse
una idea de lo que tenía que ser ver bajar a su padre Duero
antes de embalsar toda la zona para aprovechamiento hidroeléctrico.





Ya algo pillados de tiempo por lo poco que queda de día, optamos por bajar rapidito por el camino en busca del Molino de Abajo. Encontramos varias construcciones junto a las saltarinas aguas del Águeda. Tras seguir unos cientos de metros río abajo algunos de nosotros, decidimos dar media vuelta antes de llegar a ver lo que queda del molino, pues ya son las 18 h.






El retorno cuesta arriba en busca de La Fregeneda nos permitirá disfrutar también de un bonito atardecer, llegando a los coches una hora más tarde, sin hacer uso de los frontales, justo cuando la noche se hace dueña de estos pagos.






Y para acabar, una vez más os dejo el plano del recorrido de unos 20 kms. y un enlace a la ruta colgada en wikiloc por  jolupiga por si queréis descargar el track. Todo un placer para los sentidos poder disfrutar de un día como éste... y mucho más en los tiempos que corren... Un saludo y hasta pronto.