Circular en Batuecas subiendo al pico Rongiero 13/01/2019.

Ha sido éste un día especial, diferente, compartiendo ruta con viejos amigos con los que no suelo coincidir últimamente en esta bonita costumbre de caminar con la Madre Naturaleza como compañero de viaje. También ha servido la ocasión para ampliar el círculo de amistades y hacer bueno aquello de que "los amigos de mis amigos son mis amigos". El entorno elegido para esta "kedada" no podía ser mejor, con el aliciente añadido de acercarnos al pico Rongiero, que aún no conocía, y no tener muy claro hasta llegar allí por dónde iba a transcurrir el trayecto de regreso para recuperar los coches...

No voy a profundizar mucho en detalles pues, salvo el desvío hacia el Rongiero, la marcha coincide básicamente con la que llevamos a cabo hace tres años, en aquella ocasión con varios acompañantes mucho más "menudos", que no menos aguerridos... Podéis acceder a ella pulsando aquí.

Salimos del aparcamiento de coches pasadas las 10 de la mañana y nada más dejar atrás las paredes del monasterio enlazamos con la subida que desde una pequeña presa busca la portilla del Cid.

Tras algún que otro titubeo a la hora de dejar dicha subida para seguir a media ladera en dirección al puerto de Monsagro, sobre las 11 h. ya salimos de la zona de bosque tupido y empezamos a disfrutar de las privilegiadas vistas sobre el valle, que en este primer tramo ofrece una de las mejores panorámicas de su monasterio y las ruinas de varias de las capillas que lo rodean.

Nos lo estamos tomando con mucha calma... el entorno lo merece...

Una perspectiva del monasterio abusando de zoom,
con los restos de una de las capillas en primer plano.

Seguimos subiendo poco a poco y cuando faltan diez minutos para mediodía llegamos al punto que deja ver el valle y la cascada del chorro bajo nuestros pies.., con menos agua de la normal a estas alturas del año...

Luego vendrá la pedrera que hace años bautizamos con el bonito nombre de "mariposa", por donde media hora más tarde pararemos a tomar un tentempié.

El "cohete" de la Peña de Francia ya se deja ver también por aquí...

Va a ser sobre las 13 h. cuando nos salgamos del camino que lleva al puerto de Monsagro y, por una trocha nueva para mí, vayamos en busca del pico Rongiero.

Este es el momento en que nos desviamos del camino que lleva al puerto de Monsagro.

 Al principio sigue ésta casi de forma paralela durante poco más de un kilómetro a la que nos ha llevado hasta el cruce, ganando altura poco a poco, y retrocediendo hasta llegar a la cuerda sur del valle.

Enfilamos ya por élla en dirección norte, subiendo poco a poco hasta llegar al llamado Piquito del Morc, cerca de donde descansamos un buen rato en torno a las 14 h. para hacernos alguna foto de grupo y contemplar los alrededores.

Muchos buitres por la zona, negros algunos de ellos, como éste.

Al fondo, la cumbre con el primero del grupo sobre ella...

Éstos ofrecen panorámicas distintas a las habituales en Batuecas, destacando la espectacularidad de la sucesión de cumbres al sur y al este, con el embalse de Gabriel y Galán al fondo.

Dada la parsimonia con que nos hemos tomado gran parte de la subida llegamos a dudar si acercarnos al pico, pero finalmente decidimos hacerlo, y a buen ritmo... Tras bajar un gran pedrero hasta el Collado de las Fuentes, afrontamos el último tramo de subida que con poco más de 200 m. de desnivel nos separa de los 1627 m. de altura del pico Rongiero, también conocido como Montón de Trigo o Mingorro, donde llegamos diez minutos antes de las 15 h.

El Rongiero en el centro, uno de los "gigantes" de la zona, con
permiso de la Peña de Francia, que también se ve a la derecha.

El valle de Batuecas queda cerrado al Este por una hilera de
cumbres coronada por la Orconera. Al fondo, la sierra de Béjar.

Es éste un pico que destaca en esta cuerda de Batuecas y que, por ello, supone una atalaya privilegiada para observar el entorno.

Tras casi cansarnos algunos de nosotros de darle al disparador de la cámara para llevarnos recuerdos de las vistas del valle, de la sierra de Béjar, de las montañas hurdanas, de la Peña.., nos colocamos a resguardo de los vientos y, casi mimetizados con el entorno, disfrutamos de una comida "con vistas."

Al fondo la antena del cotorro del collado y a más a la izqda.
se aprecia parte de la población de Ladrillar.

Los comensales... mimetizados con el entorno...

Y mientras comemos decidimos si volver acercándonos al collado de la Granjera para bajar por la otra ladera en busca de un camino, ya extremeño, que conduce hacia la portilla del Cid, o hacerlo por el valle principal de Batuecas tras acercarnos hasta los Puertitos...

Se ve bien Monsagro desde la cumbre...

...y también se distingue bien Ciudad Rodrigo con unos buenos prismáticos,
e incluso Almeida casi rayando la linea del horizonte...

El pico Cervero y la Sierra de Tamames.

Frente a nosotros el valle alto del Ladrillar (donde se encuentra Riomalo de Arriba) coronado por el
collado de las Yeguas y el pico Bodoya, de 1.262 m. Tras ellos se esconde Casares de las Hurdes,
y más allá, al fondo, las sierras de la Corredera y de la Canchera, que rayan los 1600 m. 

Lo avanzado de la hora nos va a decidir por la segunda opción, y tras más de media hora de descanso partimos en busca de los hitos que conducen hacia el puerto de Monsagro.

Nos cuesta un poco dar con éllos al principio pero, avanzando ya a buen ritmo, sobre las 16,30 h. ya estamos todos en el puerto, enlazando con la ruta que llevamos a cabo hace tres años.

Veinte minutos después estamos junto al chozo de los Puertitos.

Desde allí parte la trocha que inicia un descenso vertiginoso hacia el valle principal de Batuecas atravesando un bosque encantado espectacular donde mandan encinas y madroños retorcidos...

Cerca de las 17,30 h. ya estamos todos junto al cauce del río Batuecas. Aún nos quedan más de 5 kms. de bajada, pero ya estamos más relajados al saber que el último tramo se hace por un cómodo sendero que conocemos bien por donde no nos importa que caiga la noche...

Aunque al principio dudamos y no seguimos exactamente la misma ruta que hace tres años al seguir por el otro lado del río, vamos descendiendo sin problemas, y se nos hace de noche junto a la desembocadura del regato del Chorro cerca de las 18,30 h.

Apuraremos aún un poco antes de guiarnos con los frontales, llegando una hora después a los coches  bajo un cielo rebosante de estrellas con una jornada inolvidable guardada para siempre en la memoria.

Os dejo por último el recorrido con el kilometraje en un formato nuevo. Podéis compararlo con el que subí hace tres años, con más información al encontrarse sobre el mapa del IGN.