domingo, 14 de febrero de 2021

"Disfrutando" de la nevada del 8 de enero de 2021 y las heladas de la semana siguiente. Salamanca y Azud de Riolobos.

Unos días antes del motivo principal de esta entrada, como de costumbre, no me podía resistir a hacer alguna fotillo urbana o "periurbana" durante los paseos vespertinos junto al Tormes o por la ciudad que también quiero compartir aquí... Esto de llevar el móvil encima le lleva a uno a "afotar" montones de veces las catedrales, las últimas luces sobre el río, la salida de la luna... Algunas parecidas, ninguna igual. 



El lunes 4 me acerqué al parque de los Jerónimos, junto al carril-bici que sigue el Tormes por su margen derecha, y tuve la suerte de ver y fotografiar al pardillo sizerín que nos ha venido a ver a Salamanca y aún debe seguir por aquí. Es una de las primeras citas históricas de la especie en la península, todo un acontecimiento para los pajareros. Dicho sea de paso, parece ser que se trata de un ejemplar alpino y no nórdico como se pensaba al principio, a pesar de lo cual sigue siendo algo extraordinario.

Pardillo sizerín

Mosquitero común

Y el día 8 comenzó a nevar... y siguió nevando por la noche... Y a la mañana siguiente, aún cayendo pequeños copos sobre Salamanca, había que aprovechar para hollar sobre la blanca alfombra recién estrenada en busca de jugosas observaciones...

Tras quedar con un amigo junto a la isla del Soto a mediodía me fui tranquilamente por el carril bici disfrutando del panorama y acercándome a la orilla del Tormes a "pajarear" un poco.

Lavandera común

Pareja de azulones


El acceso por el puente a la isla del Soto lo encontramos cerrado ante el riesgo de caída de ramas ¿?, pero prismáticos y cámara en ristre dimos un agradable paseo de hora y pico por la zona abierta de la Aldehuela, interpretando huellas y pudiendo observar varias especies de aves, entre ellas varios zorzales alirrojos, que hacía tiempo que no veía por aquí.

Muchos petirrojos buscando algo que llevarse al pico entre la nieve.



Jilgueros

La observación más llamativa iba a ser la de una pareja de abubillas que nos van a dejar aproximar a pocos metros y disfrutar de su habilidad para localizar y atrapar larvas bajo la nieve aprovechando ese sensor de primera que tienen en su curvado pico.

Abubilla


Zorzal común que se desplazaba junto a los alirrojos
de los que os hablo más arriba, a quienes no pude "afotar".

Macho de pinzón común. Vimos un pequeño bando llevándose
 al pico una especie de pajitas que seguramente
tenían pequeñas semillas de las que se alimentaban.


Tenía que recoger un encargo en el centro y tras despedirnos acelero el paso y por el carril bici me dirijo hacia allí sin poder resistirme a hacer algunas fotos según voy bajando...








Por la tarde salimos de nuevo Lucía y yo a disfrutar del espectáculo. Bajamos de nuevo hacia el centro por el carril bici y las últimas luces del día llegaron cuando nos encontrabamos junto al puente romano.







Aún habrá tiempo para afotar algunos de los monumentos del centro con la nieve como protagonista...





El domingo por la mañana un nuevo paseo hasta la zona abierta de la Aldehuela ya sin la compañía de los pequeños copos que no pararon de caer en los del día anterior, me iba a dejar muy buen sabor de boca, especialmene el rato que estuve observando con los prismas un pico picapinos hembra sacando virutas de un gran agujero que no paraba de profundizar sobre un árbol..



Hembra de pico picapinos.



Potentes heladas las caídas durante la noche anterior y las siguientes, lo que iba a hacer que la nieve aguantara mucho más que en otras ocasiones.


Mirlo común

Gorrión común

El mismo bando de pinzones del día anterior se encontraba bajo
 los mismos árboles sacándole a las pajitas lo que podían.



Los paseos del día siguiente también dejaron curiosas
observaciones, como la de estos cormoranes grandes, especialmente
 cuando el de la izquierda desplego sus alas para secarlas al sol...




Un contraluz a última hora desde la Fontana con dos
 de los elementos más característicos del "skyline" de
nuestra ciudad (el de los humos para nuestro pesar...).

Martín pescador


Este cormorán se llevó un pequeño susto
cuando salió a la superficie muy cerca de mí...


El viernes 15 se unirá a la fiesta la niebla, por la mañana... 




Hembra de pico menor


Las bajas temperaturas dejaban buenos tramos
 del Tormes helados en su superficie...


¿Veis el martín?

... y de nuevo volvió la niebla  por la noche...


Y la mañana siguiente nos regalaba una cencellada preciosa...

Iba a ser el preludio de lo que encontraríamos al día siguiente camino del azud de Riolobos donde, aunque cueste creerlo, no iba a hacer acto de presencia ni un pato... ni una grulla... Las bajas temperaturas harían que lo encontresemos "candado",como se dice por estos lares cuando el hielo cubre por completo una superficie de agua. Supongo que las aves buscaron refugio y alimento en otros lugares menos inhóspitos durante unos días...

En el trayecto en coche quedamos sorprendidos por otra espectacular cencellada y por la gran cantidad de nieve que aún aguantaba por la zona (fue al NE de la provincia donde más cayó...).


Despoblado de Riolobos








Al coincidir nuestra llegada con la desaparición de las nieblas la temperatura empieza a ser llevadera y vamos a poder disfrutar de una mañana inolvidable paseando entre el despoblado de Riolobos y el azud.


Este ratonero fue una de las pocas aves que se dejaron ver.



Lo que sí había eran muchas huellas de animales sobre los caminos nevados.







Grietas de dilatación sobre el hielo. Sorprende
oir los ruidos que producen al formarse.


Encontramos restos de una lechuza que parecía
haber sido devorada por un mamífero.





La "jugosa" observación pajarera de la mañana, un alcaudón real.


Y otra jugosa e inesperada observación la de esta
 pareja de aventureros en su R4 y su 600...




El miércoles 20, ya con un largo capítulo de borrascas descargando agua sobre Salamanca que ha acabado hace un par de días también hice alguna fotillo decentilla durante el paseo vespertino pre-toque de queda a las 20 h.


Este día el "toque de queda" me pilló "in itinere"...

Y el domingo por la mañana una ventana entre borrascas nos permitirá dar una vuelta entre Cabrerizos y los escarpes ya sin rastro de nieve, pero siempre espectacular con las amplias vistas que ofrece sobre Salamanca y los alrededores. ¡Salu2 y salud para tod@s! 





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