Sin alejarnos mucho de Salamanca, aún seguimos descubriendo rincones que nos sorprenden por su gran riqueza natural. Esto es lo que nos pasó en febrero al hacer esta bonita ruta de cerca de 20 kms.
Comenzamos a caminar pasadas las 10,30 h., cruzando el pueblo en busca del camino de Valcuevo, por donde comenzamos a bajar hacia el arroyo del Bravío.
Estas simpáticas macetas salieron a darnos los buenos días. |
Zorzal común |
Curruca cabecinegra |
A mediodía paramos junto a un palomar restaurado, ya cerca de la desembocadura del arroyo en el Tormes.
Seguimos bajando hasta llegar al nivel del Tormes en el puente de San Lorenzo, también conocido como puente de la Cicutina.
El impresionante cañón por el que baja el Tormes desde el embalse de Almendra hacia su desembocadura. |
Puente de San Lorenzo, o de la Cicutina, en el límite provincial entre Zamora y Salamanca, un rincón de gran belleza rodeado de una diversa y rica vegetación. |
Cerca de allí nos encontramos con el amigo Juanjo, que nos muestra pruebas palpables de la actividad del castor europeo por la zona.
No se sabe muy bien cómo puede haber llegado el castor hasta aquí, pero hay varias huellas de su actividad por la zona. |
Es curioso que parecen roer sólo los árboles de una determinada especie de chopo. |
Cerca de las 13,30 pasamos junto a una bonita cascada por la que un arroyo precipita sus aguas prácticamente en el Tormes.
Y tras una pequeña subida volvemos al Tormes, llegando sobre las 14,30 a un rellano junto al río conocido como los Baños del Cordero. Paramos a comer allí, tras dudar si hacerlo en los restos de un molino sito en sus proximidades.
Los postes de alta tensión recuerdan la gran producción hidroeléctrica que caracteriza a esta zona arribeña. |
Tras 45 minutos entre comida y siestecilla recuperadora retomamos nuestra ruta, y por un bonito sendero con espectaculares vistas hacia un gran encajonamiento del Tormes nos acercamos a la no menos espectacular cascada de la Escalá.
Siguiendo a nuestro guía... |
Antes de llegar a un gran y espectacular encajonamiento del Tormes el camino gira y sube hacia la cascada. |
La fascinante cascada de la Escalá, que lo debe ser más aún en época de lluvias. |
Tras pasar un buen rato en este rincón de gran belleza a pesar de no llevar mucha agua, seguimos por el sendero que, tras superar un tramo de gran desnivel, llega a un camino que nos llevará de nuevo a Fermoselle con algunos de sus tramos ya engalanados con las primeras flores de los almendros.
Los primeros espárragos ya se dejan ver junto al camino. |
Llegando a Fermoselle. |
Llaman la atención las acertadas intervenciones en el mobiliario urbano de vecinos y asociaciones. |
Descansando en la rama. |
Aunque podíamos haber llegado a los coches sobre las 18,30 h. me acerco antes a ver una curiosa peña de forma "cular" que se encuentra bajo el mirador principal de Fermoselle, de la que tuve conocimiento en un programa de la 2 el día anterior.
El "culete" de Fermoselle. |
Una de las vistas hacia el Duero desde el pueblo. |
Un cuarto de hora después ya estoy de nuevo con el resto del grupo tomando unas cañitas antes de regresar a Salamanca.
Os dejo plano y perfil de la ruta junto a enlace a la página de Jolupiga, donde podéis conseguir el track.