viernes, 23 de octubre de 2015

Montaña palentina 10-12/10/2015.

Como bien vaticinaba el amigo Paco en su comentario a la última entrada de este blog, tocaba una entrada dedicada a la montaña palentina, la otra "bella desconocida" de la provincia que, como la catedral de su capital, esconde muchos tesoros.

Decidimos varias familias salmantinas y vitorianas compartir un nuevo puente tras lo bien que lo pasamos hace unos meses en el norte de Burgos, y aunque fallara alguno también se incorporaron nuevos intrépidos aventureros, alguno de muy corta edad, consiguiendo un compacto grupo de más de 20 personas. Elegimos el albergue de Arbejal como centro logístico, y la mayoría ya se desplazaron a pasar la noche del viernes allí. Paco's, Guiller's y Manolo's madrugamos en Salamanca al día siguiente y sobre las 11 de la mañana ya estábamos con el resto para iniciar la marcha que habíamos elegido para ese día, que tiene el curioso nombre de "ruta de los bisontes".

Partiendo de San Cebrián de Mudá, se dirige por una "comoda" pista a Herreruela de Castillería, atravesando un tupido rebollar que empieza a tomar tintes otoñales. A la salida de San Cebrián encontramos un centro de interpretación del bisonte europeo junto a varias tiendas indias (tipis) "americanas".


Un poco más adelante encontramos la reserva que desde hace años acoge a unos cuantos ejemplares dentro de un programa de recuperación de la especie. A tan solo unos metros de la pista que seguimos se puede visitar ésta, que se anuncia como un amplio paraje donde el bisonte vive en libertad... Lo que encontramos la verdad es que me defrauda algo; no dudo de la buena labor que se hace a la especie y del buen recurso que supone para fijar población en esta antigua zona minera, pero 6€ por persona (desde los 7 años de edad) es excesivo cuando a cambio te encuentras con 8 animales junto a unos establos... La información que he visto en internet resulta confusa, pues se habla también de la existencia de varios caballos de Przewalski, única subespecie "salvaje" del mundo, pero no están aquí sino en otra ubicación visitable aparte junto a más bisontes en el vecino pueblo de San Martín de Perapertú.

Hay otra posible actividad en el mismo pueblo que a priori resulta muy atractiva, el "mirador de las estrellas". Con precios similares, aprovechando un antiguo cargadero y una mina se han instalado un pequeño planetario y telescopios y se hacen visitas diurnas y nocturnas combinando explicaciones sobre la explotación del carbón en la zona con otras relacionadas con la astronomía. Se complementa la visita con observaciones del sol por el día y planetas, estrellas, satélites, constelaciones... por la noche. Las predicciones de cielos nublados y la coincidencia de horarios de la actividad nocturna con la hora de la cena en el albergue nos hizo descartar esta posibilidad, pero promete la cosa para otra ocasión...

De camino a la reserva nos encontamos con un coche tirado por caballos llevando visitantes a la reserva.


La mayoría de nosotros entramos a la reserva donde lo que más me sorprendió fue el tamaño de los bisontes adultos, que creía más pequeños.



Pasadas las 12,30 h. seguimos camino de Herreruela, entrando enseguida en el bosque y saliendonos de la pista por un camino antiguo que se cerrará demasiado al llegar a una finca, lo que nos hace regresar y seguir por ella, subiendo poco a poco hasta llegar al paso de la Muñeca, desde donde se ofrece una panorámica muy guapa con el valle del arroyo de la pradera a nuestros pies. También se dejan ver restos de la abandonada actividad minera cada vez más ocultos por la vegetación.

Limonera



Este alto separa zonas de pastos que se repartían los ganaderos de la zona, los cuales, según la tradición, se comprometían a respetar los límites bajo pena de cortarse una muñeca de no hacerlo... de ahí el nombre.

Aprovechamos el claro del bosque y las buenas vistas para comer en el alto cuando ya son las 14,15 h.


Una hora más tarde iniciamos el descenso hacia Herreruela con las siluetas del Espigüete y el Curavacas como telón de fondo.



En la bajada se nos cruzan varios bichitos curiosos y antes de llegar al pueblo dejamos a nuestra derecha la ermita de Ntra. Sª del Monte.

Luciérnaga


Ya en Herreruela encontramos una bonita iglesia de portada gótica y confesionario "exterior". Algunos subimos al campanario, desde donde se ofrecen buenas vistas sobre el pueblo y los alrededores.




Sobre las 16,30 h. dejamos el pueblo, cruzándose en el camino una culebra ¿de agua? con la que pasan un buen rato los más pequeños.







En vez de volver por el mismo camino como indica la descripción de la ruta, decidimos hacerla circular subiendo hacia la sierra de Corisa en busca de un camino que nos lleve de nuevo a San Cebrián. Esto nos permitirá recrearnos desde las cumbres de más de 1400 m. de esta sierra con las cumbres más altas de Palencia, encabezadas por Peña Prieta, dejándose ver también una buena parte del macizo de Andara, ya en Picos de Europa. Una pena que la calima y la hora del día no acompañen para verlo mejor...








El descenso lo hacemos por un bonito camino que cruza el bosque, atrochando al final ya cerca del pueblo para llegar con tiempo de visitar su iglesia de San Cornelio y San Cipriano con calma.



Sobre las 19,30 h. ya hemos localizado a la señora Carmina, que tiene las llaves de la iglesia, cuyo interior nos enseña, acompañando unas explicaciones muy interesantes sobre las pinturas del s. XIV encontradas en los años 60 del pasado siglo bajo el encalado de las paredes. Estas pinturas, atribuídas al maestro de San Felices, con influencia de la escuela leonesa, suponen una grata sorpresa, por su calidad y estado de conservación. Nos vamos con un buen sabor de boca tras la visita, a pesar de hacerse tarde ya para visitar el acebal de las Camuñas, situado en las proximidades de Perapertú, otro de los objetivos del día.




Llegaremos justo a la hora en que se cena en el albergue... las 20,30 h.... un poquito pronto, la verdad.

Al día siguiente las predicciones meteorológicas son peores, pero al final podemos hacer sin grandes contratiempos la marcha que decidimos durante el desayuno, la senda del escultor Ursi. Se trata de una ruta circular que atraviesa los parajes por los que solía pasear este escultor palentino, recientemente fallecido. Ha sido señalizada recientemente, y está jalonada con un gran número de esculturas de distintos autores palentinos por iniciativa de la Diputación provincial y otros patrocinadores. Nosotros comenzamos la marcha en Villabellaco, escuchando los cantos de varios camachuelos comunes que no llegaremos a ver (si lo haremos a la vuelta, fugazmente y cuando pasan volando, por lo que no tengo fotos).

Nada más entrar en el pueblo nos sorprende una escultura que señala la entrada al museo de madera y maquetas de Herminio Revilla. A la entrada del museo, nos llaman la atención otras esculturas y quedamos con Don Herminio y su señora para visitarlo a la vuelta, pues promete ser interesante y, según nos indica, es mejor visitarlo con tiempo, para ver funcionar los automatismos y escuchar mejor las explicaciones.





Salimos del pueblo sobre las 11,15 h. y pronto nos internamos en el rebollar por un agradable camino, encontrando curiosas esculturas cada poco tiempo. Pasamos por el mirador de la Rulaya, desde donde se puede intuir el alto de los Castillos, punto culminante de la ruta a casi 1400 m. de altura, por donde regresaremos por la tarde. Digo intuir porque las nubes bajas y nieblas ocultan parte de aquellos montes.







Sobre las 13 h. nos encontramos en Valle de Santullán, pueblo situado casi el la mitad del recorrido. Algunos tomamos un tentempié y otros ya comen junto a su iglesia. Recorremos después el pueblo, encontrando huellas de un pasado floreciente y algunas esculturas más seguramente ubicadas aquí al trazarse la ruta (la del gallo, junto al lavadero y la fuente, y la de una señora mayor resguardándose de la lluvia y el frío me parecen de gran calidad).








A la salida del pueblo vemos estos dos escarabajos "jugando al burro"...


En plena cuesta camino del alto de los Castillos y su mirador de la Solana las vistas sobre el pueblo y hacia el valle del río Baillo, que baja camino de Villabellaco son cada vez mejores... hasta que nos metemos en la niebla.





Al salir de las nubes paramos a comer en el bosque, pues ya se hace tarde y los del tentempié reclaman "más madera". Y un poco más abajo llegamos al Santuario del Carmen donde algunos de nuestros expedicionarios deciden tomar algo mientras los niños se entretienen comiendo un helado y jugando.

Grillo de matorral


Quitameriendas

Me parece precioso el belén que han colocado en la zona...



Hasta una hora más tarde no llegamos los primeros de nuevo a Villabellaco, y cuando ya estamos todos, la mayoría entramos al museo. Desde luego, vale la pena su visita, que creo recordar que tan solo supone un desembolso de 2€ por persona adulta (los niños no pagan... y se lo pasan muy bien...).


Nos lo volvemos a tomar con calma, como corresponde y, como sucedió en la víspera, tampoco hoy se nos logra la visita al acebal, a pesar de pasar por Perapertú de regreso a Arbejal.

Por la noche entra la potente borrasca que estaba prevista y a la mañana siguiente decidimos cambiar los planes, descartando la marcha que tenía pensada por la foz de la Escalada y las Tuerces, en las proximidades de Aguilar de Campoo. El aguacero que nos cae en Cervera, donde paramos a comprar pan y decidir lo que hacemos, hace que se descarten paseos y unos partan ya a Salamanca, otros a Barruelo de Santullán para visitar su museo de la minería y el resto nos acerquemos a Olleros de Pisuerga, que cuenta con una curiosa y antigua iglesia rupestre.

Excavada sobre la roca arenisca, la iglesia de Olleros forma parte de un conjunto eremítico de los que proliferan por la zona, cuyo origen se remonta a los movimientos repobladores de los s. IX y X. El templo consta de dos naves separadas por tres columnas, una de ellas original y otras dos colocadas en el s. XVIII al deteriorarse las originales. Su decoración es escasa, pero las vetas ferruginosas de la arenisca y el aspecto hipogeo dan un toque especial al interior, lo que hace muy recomendable su visita.






Aunque la lluvia impide que podamos dar un paseo en busca de otras manifestaciones eremíticas por los alrededores, si que subimos a la torre-campanario, alejada bastantes metros de la iglesia, desde donde se ven otras oquedades.


Para nuestra sorpresa, nos reencontramos con los que se fueron a Barruelo, que no han podido visitar el museo por "overbooking", quedando con ellos en la iglesia del convento de Sta. Mª de Mave, muy cerca de Olleros. La lluvia hace que el señor que tiene las llaves del templo condicione su visita a que le acerquemos a él en coche desde su casa, y así lo hacemos, pudiendo entrar en esta joya del románico, según rezan los prospectos, aunque más bien parece cisterciense, al predominar los arcos apuntados y una escasa decoración escultórica. La escasez de mobiliario realza aún más la belleza de esta iglesia, perteneciente a un convento que debió tener mucho poder en otras épocas. Me llama la atención la existencia de una cúpula descansando sobre trompas, el uso de arcos fajones y la utilización de sillares alternando con diferentes colores en uno de ellos, el situado tras el altar.




La portada del hastial, por la que hemos entrado en la iglesia, cuenta con una curiosa decoración que recuerda a las iglesias de Centroeuropa, probablemente el origen de los canteros.


Sapo común que salió despavorido al abrirse las puertas de la Iglesia.

Tras echar un vistazo a lo poco que queda del resto del convento, convertido en hotel, nos despedimos sobre las 13 h. de nuestros amigos vitorianos y de algunos salmantinos que deciden ya regresar, y precisamente los más tardíos en llegar a tierras palentinas decidimos apurar más nuestra presencia en estas bellas tierras visitando la villa romana "La Olmeda", situada cerca de Saldaña.

Como el hambre aprieta, decidimos parar a comer en Saldaña antes de visitar la Olmeda, aprovechando para dar un garbeo por el pueblo, con bonitas plazas porticadas y algunas casas nobles bien conservadas.
Una pena pillar cerrado el museo monográfico de la villa de la Olmeda, instalado en la iglesia de San Pedro y que puede visitarse con la misma entrada que da acceso a la villa.




Poco antes de las 16 h. (el museo abre ininterrumpidamente de 10,30 a 18,30 h.) accedemos a la villa. Por tan solo 5€ (los menores de 11 años no pagan) uno tiene acceso a un impresionante museo instalado "in situ" sobre los restos, contemplando mosaicos que se cuentan entre los mejor conservados del mundo en el mismo lugar donde los colocaron dentro de la villa. Aunque hay una visita guiada decidimos hacer el recorrido por nuestra cuenta y la verdad es que los paneles informativos y las pantallas interactivas ayudan muy bien a comprender la historia y funcionamiento de esta villa, con orígenes el el s. I o II y máxima pujanza en el s. IV.


De los muchos detalles que me sorprenden durante la visita destacaría la existencia de retratos de algunos habitantes de la villa alrededor del mosaico principal, las escenas de caza de felinos africanos o la utilización de la cruz gamada con profusión en varios mosaicos.




Ya en la zona de los baños se conserva una buena parte del solado de baldosas de las laetrinae, así como los desagües, reproduciendose en madera los retretes que compartían los romanos sin pudor alguno. Vale la pena, y mucho, una visita a la villa...


4 comentarios:

  1. Vaya partido que le sacastéis a los 3 días, me encanta cómo planificas las rutas combinando naturaleza con arte, sobre todo teniendo en cuenta que lleváis niños. Palencia y especialmente su montaña y el arte nunca defraudan.

    ResponderEliminar
  2. Felicidades de nuevo por tu nueva entrada. Como dice Antonio fue una perfecta combinación de naturaleza y cultura. Clases extraescolares para los niños. La próxima Redes.

    ResponderEliminar
  3. Muchas gracias, un trabajo muy bonito

    ResponderEliminar
  4. El sitio es super interesante y se pueden ver un montón de cosas. hay un poco de todo, cultura y naturaleza, sin aglomeraciones ni estrés. Nosotros lo hemos pasado muy bien. La pagina blog lo borda. Gracias. Menudo nivel!!!

    ResponderEliminar